¿Qué le espera en un lodge de la selva amazónica?

¿Qué esperar en mi visita a la selva Amazónica?

Dos tercios del territorio peruano están clasificados como selva amazónica, y hay varios puntos de entrada populares. Uno de ellos es Puerto Maldonado, en Madre de Dios, a la distancia de un corto vuelo desde Cuzco.

Es normal que, si es su primera vez visitando la selva amazónica, no sepa qué esperar de los alojamientos que lo recibirán, es por ello que redactamos este artículo, debajo verá las condiciones en las que estos famosos y cómodos lodges son construidos a la mitad de la Amazonía para ayudarle a tener una idea más clara de lo que estos ofrecen como también ayudarle a tomar una mejor decisión en cuanto a sus necesidades, comodidades y presupuesto. Si bien nuestro objetivo es darle una breve descripción de la función y posibilidades que tienen estos lodges deberá buscar en la página de cada establecimiento para ver cuáles son las comodidades que ofrecen individualmente.

UBICACIÓN:

A la hora de elegir un alojamiento, investigue siempre su ubicación ya que los albergues son típicamente definidos por su ubicación. Así, cuanto más alejado esté el albergue, mayores serán las posibilidades de ver especies más raras como los felinos, pero el costo será un tanto más caro, debido a los costes logísticos adicionales.

Los alojamientos situados cerca de parques nacionales, como Tambopata o Bahuaja-Sonene, o incluso ubicados por dentro de grandes reservas privadas, tienen ventajas sobre los situados en zonas sin protección o cerca de zonas urbanas, ya que presentan una mayor diversidad y densidad de vida salvaje como también mejor conservada.

TAMAÑO:

Debido a su ubicación en zonas remotas de la selva y a la necesidad de mantener una huella baja, todos los lodges amazónicos de Perú se consideran «pequeños» según los estándares de hospitalidad. No obstante, es obvio que hay una diferencia entre un lodge de 6 habitaciones y uno de 30. En el primero, si se dispone de una habitación doble, el alojamiento puede ser muy pequeño.

En el primero, si se tiene un carácter gregario, es fácil ver y conocer a los demás huéspedes y a gran parte del personal.

Por el contrario, sólo hay un pequeño grupo de personas con las que pasar el tiempo, sobre todo si el albergue no está lleno, y puede que no le guste que le junten con viajeros con los que tiene poco en común.

Además, en un lodge pequeño, puede que no haya suficientes visitantes anglófonos como para contar con un guía de habla inglesa, por lo que las descripciones del guía pueden ser en español y en inglés, lo que puede resultar un poco frustrante.

Al contrario, en un lodge más grande, inevitablemente hay algo más de anonimato, pero aumentan las posibilidades de encontrar espíritus afines entre los demás huéspedes.

SERVICIOS:

Alojarse en un lodge rodeado de selva amazónica pone a los visitantes en estrecho contacto con la naturaleza Amazónica. Sientes la presencia del ecosistema a tu alrededor y, por la noche, oyes los sonidos del mundo nocturno de la selva. Una estancia en un lodge amazónico le permitirá sentirse parte del ciclo natural de dormir al anochecer y levantarse al amanecer.

Pero puede elegir hasta qué punto desea vivir una experiencia «cercana a la naturaleza». En algunos lodges, el alojamiento es similar al de una habitación de hotel, con aire acondicionado, electricidad y agua caliente las 24 horas y servicio de limpieza.

Además, algunos de ellos disponen de piscina, lo que puede resultar especialmente interesante para quienes viajan con niños.

En el otro extremo del espectro, hay lodges más rústicos cuyas habitaciones son cabañas de madera, con mosquiteras para las ventanas, una o varias camas, ventilador de techo e iluminación proporcionada por velas o linternas.

Así pues, es importante tener en cuenta de qué comodidades se puede prescindir y de cuáles no a la hora de elegir un lodge, sea muy cuidadoso con ello ya que debido a las políticas del ecoturismo y la sostenibilidad la energía que disponen en estos alojamientos es limitada a unas cuantas horas del día.

GUÍADO:

En una zona de enorme biodiversidad como la selva amazónica, es vital contar con un buen guía naturalista, con los conocimientos, el entusiasmo y las habilidades lingüísticas necesarias para dar vida a la flora y la fauna.

Aunque no es posible conocer los méritos relativos de todos los guías que trabajan en el Amazonas, hay alojamientos conocidos por invertir más en la formación de su personal. Estos suelen estar en el extremo superior de la escala de precios, así es que si desea tener en lo general lo mejor en los servicios proporcionados procure invertir un poco más en su alojamiento.

ACTIVIDADES:

Debe conocer qué muchos lodges incluyen dentro de sus tarifas una gran variedad de excursiones y actividades a lo largo del Amazonas:

• Safaris en barco en búsqueda de fauna para observar, especialmente las aves.
• Caminatas a lo largo de senderos adentrados en la selva, para examinar la flora de la selva tropical y el comportamiento cotidiano de insectos.
• Pesca de pirañas y otras especies de peces pequeños con equipos rudimentarios hechos a mano.
• Visitas a las aldeas ribereñas, probablemente tenga la opción de una parada en la escuela local, para poder experimentar y convivir con la vida cotidiana amazónica.
• Paseos nocturnos a los alrededores del albergue, en busca y escucha de murciélagos, aves, anfibios y arácnidos nocturnos.

Sin embargo, hay actividades que son propias de uno o unos pocos albergues. Esto suele depender de su ubicación estratégica dentro de la selva tropical.

• Torres de dosel u observación / Pasarelas: más del 50% de la biodiversidad de la selva amazónica se encuentra en el follaje de las copas de los árboles, es por ello que merece la pena subir a gran altitud para contemplar esta faceta única y magnífica de la selva.
  Varios lodges han construido torres o puentes entre los árboles, que ofrecen unas vistas maravillosas y la posibilidad de observar aves. Un par de lodges han ido más allá y ofrecen la posibilidad de dormir en una casa del árbol.
• Las kollpas (collpas): las orillas de algunos ríos amazónicos, sobre todo en la región de Tambopata, atraen a diversas especies de aves y mamíferos, que comen la arcilla para beneficiarse de los minerales que contiene y complementar su dieta.
  Si quiere ver guacamayos, loros y periquitos a centenares, un tapir o una manada de pecaríes, la kollpa es imprescindible. Muchos albergues han construido persianas para ver mejor a los animales, sin molestarlos en sus actividades cotidianas.
• Cochas: suelen ser el hogar de nutrias gigantes de río y, en general, abundan los animales salvajes fáciles de observar.
• Actividades de aventura:
  
  • Acampada: varios lodges ofrecen una noche bajo lona en la selva como parte de itinerarios más largos. Es una forma estupenda de vivir el Amazonas en estado puro, inmerso en sus vistas, sonidos y olores. No es apto para personas nerviosas, aunque los guías montan las tiendas, preparan la comida y están presentes en todo momento.
  • Kayak: remar suavemente en un sereno lago amazónico es un formato maravilloso para disfrutar de la flora y la fauna. Despreocupado y tranquilo.
  • Tirolina
  • Bicicleta de montaña
  • Construcción de balsas
• Yoga: muchos afirman que la selva amazónica posee una energía única, derivada del gran número de árboles y del oxígeno que generan.
  Los lodges suelen tener un espacio común (maloka) ideal para clases de yoga. Sin embargo, rara vez proporcionan un instructor; en su lugar, los especialistas en yoga reservan un lodge (o parte de él) para determinadas fechas del año, con un gurú invitado para dirigir las clases. De esta manera, los visitantes pueden unirse a estos grupos.